• Chicas, ¿alguien me cambiaría unos dólares?
  • ¿Qué estás por hacer, Mecha? ¿Alguna operación inmobiliaria?
  • No. Quiero comprar cebollas. Me quisieron cobrar $50 el kilo.
  • ¿Vos estás loca? No hay que comprar y listo. ¡Boicot a la cebolla!
  • Pensar que cuando éramos chicas te regalaban la verdurita, ¿se acuerdan?
  • “Altri tempi”. En breve, nos van a cobrar el aire que respiramos. “¡Attenti!”
  • Yo me jugué la vida y les traje un regalito a cada una.
  • ¿Una cebolla, Moni? ¡Decíme que sí!
  • ¡No! Una pastillita de Viagra femenino. Ojo que es medio clandestina. Guárdenla rapidito sin hacer alharaca.
  • ¿Y para qué sirve?
  • ¿Cómo para qué? Para recuperar el deseo sexual, pelandruna.
  • Pero si no tengo con quien practicarlo, Moni. Margaritas a los chanchos.
  • Eso es lo de menos. Si recuperás las ganas, alguien va a aparecer. Se te va a notar en el cutis, en tu andar. La libido te va a explotar. Vas a destilar sexo.
  • ¡No, gracias! Yo paso. Mirá si se me acerca el gigoló ése que anda cuentenando y esquilmando minas. Buey solo bien se lame, querida.
  • ¿Cuál? ¿El del comedor destruído? ¿El del lope grasiento?
  • Ese. El polista trucho, de doble apellido. Un capo el chabón. Seco, cero pinta, más feo que el Cuco, y se alzó con flor de botín. El Gran Simulador.
  • La culpa la tenemos nosotras, que nos dejamos embaucar a cambio de unos mimitos, de una mísera sobada de lomo.
  • Y … la necesidad tiene cara de hereje, dicen.
  • Sí, y cuando hay hambre, no hay pan duro, ni gigoló outlet.
  • Digan lo que digan, chicas, el tipo se hizo famoso de la noche a la mañana.
  • Ya lo anunció Andy Warhol: “En el futuro, todos tendrán sus 15 minutos de fama”. El ya tuvo su cuarto de hora.
  • Puedo entender  que copara los programas de chimentos, pero que hasta Santo Biasatti lo entrevistara en el noticiero, ¡too much! Un exceso.
  • Tenés razón. Como si no hubiera temas urticantes que resolver. Las inundaciones, la muerte dudosa de un fiscal de la Nación, las próximas elecciones, los chanchurrios varios que se destapan a diario…
  • Nos distraen con freaks de circo, amigas. El objetivo es lobotomizarnos a todos y a todas.  Distraernos con seductores seriales y con los guarros y guarras del aguantadero “Gran Hermano”, con el impresentable Rial a la cabeza.
  • ¿Lo decís porque se puso de novio con la colorada, ex Vice Primera Dama?
  • Dios los cría, y ellos se juntan. Pero ojo al piojo, que la colo va a tener que explicar unas cuantas cosas ante la Justicia.
  • No creo. Todos zafan. Sólo van presos los ladrones de gallinas. Bah. Ni ésos.
  • Al chimentero le va a dar un bobazo en cámara. Se calentó mal con los “hermanitos”, ¿vieron? Se puso firme.
  • ¡Puro cuento, nena! Fue todo un “acting”. No saben qué hacer para mantener ese bodrio al aire. Lo que no entiendo es por qué la gente gasta guita votando.
  • Yo los encerraría a los candidatos presidenciales en la Casa de GH. Pero no a los imitadores de Tinelli. A los posta, posta. Para escudriñarlos con lupa.
  • Se sacarían los ojos. Se agarrarían a las piñas. Mostrarían la hilacha.
  • Y buá. La supervivencia del más apto, diría el compañero Darwin. ¡Chin, chin!